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viernes, 26 de febrero de 2010

Observación de las Estudiantes de CORP en la ULEAM

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Observación de las estudiantes de II semestre de Comunicación Organizacional y Relaciones Públicas

Elaborado por:

v Alcívar García Yajari

v Cedeño Mejía Adriana

v Quiroz Murillo Ma. Gabriela

En cada lugar o circunstancia que nos encontremos, debemos tomar iniciativa, resolver situaciones y enseñar a los demás a estudiar, son valores que el ser humano debe acumular en su pensamiento y a elaborar en la vida a diaria.

En la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí realizamos nuestro trabajo de campo a la 9:05 de la mañana, en donde nos dirigimos a la biblioteca Dr.: Miguel Moran Lucio en la que se observó alrededor de seis estudiantes realizando investigaciones, estudiando, etc.

Tuvimos la colaboración del señor Rolando Castaño donde nos mostró los resultados de las visitas a diario de los estudiantes en el centro de referencia facilitando a los usuarios que tengan el acceso al departamento de información, bibliográfica, servicios educativo, sala de lectura , la librería universitaria, y sala de internet gratuita, en este lugar laboran 8 personas en donde se especializan en ofrecer atención y orientación personalizada en el uso del catálogo manual y el préstamo de los mismos .

Los estudiantes de la Facultad de Medicina son los que le dan más uso al departamento de biblioteca y sala de internet obteniendo un porcentaje de: 260 estudiantes a la semana mientras que la facultad Ciencias de la Comunicación recibe la visita de 7 estudiantes a la semana, después de la investigación nos aproximamos a la sala de internet nos atendió la señora: La secretaría María luisa Sabando y la comunista Yaneth Saltos quien está a cargo de éste departamento. Aquí trabajan 6 personas para el abastecimiento de las máquinas, limpieza, etc.la atención es de lunes a viernes a 8:30 a.m hasta las 21:00 p.m

El porcentaje del estudiante que se dirigen a la búsqueda de información es aproximadamente de 3.059 usuarios y muchas veces varían de acuerdo a sus necesidades.

Se reflejó un promedio de el 5.3% en la facultad de Medicina e Ingeniería, y en la Facultad Ciencias de la Comunicación en las especialidades de Periodismo es de 1.32%, de Publicidad es de 3.3%, y el Relaciones Públicas es de 2.1%.

Nosotros como comunicadores debemos de estar informados día a día, procurando más visitas al centro de aprendizaje, obteniendo más conocimientos para la vida profesional. Un ejemplo claro, en ocasiones encontramos a personas con habilidades de obtener conclusiones casi inmediatamente, teniendo una respuesta y explicaciones de cada asunto, esto se da al interés que el alumno se proporciona.

Llegamos a la conclusión que hay persona que han creído que solo se debe aprender lo que es necesario e indispensables para desempeñar una labor específica, pero aún, que no queda más remedio que hacer el mínimo esfuerzo para solventar una situación académica


Pero ¿Por qué? Nos da pereza aprender. Sencillamente porque decíamos que todo tenga una utilidad práctica, esto si agregar el esfuerzo y el tiempo que supone estar frente a un libro. ¡Que falta de aspiración y deseo de superación personal!

Antes nuestra incapacidad, nos convertimos en dependiente de las circunstancias de las personas, buscando culpables eludiendo responsabilidades. Una persona en constante preparación, se muestra interesada en todo lo que le rodea a su semejante porque quiere superarse y encontrar la manera de ser más útil.

sábado, 20 de febrero de 2010

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“LO QUE HACEN LOS MEJORES PROFESORES UNIVERSITARIOS”







Elaborado por: Adriana Cedeño Mejía

El educar se lo considera como una la ciencia que trata de los procesos de ENSEÑANZA-APRENDIZAJE y la técnica de aplicación de los mismos, en relación a los objetivos que se plantea en el área, la escuela y la educación en general.
Este concepto implícitamente incluye aprendizaje e interaprendizajes sistemáticos.
En este sentido desarrolla los fundamentos básicos, las condiciones, estructuras, factores y efectos del proceso de enseñanza-aprendizaje lo que apoya al profesor a la decisión sobre diferentes objetivos y actividades, en una justificación abierta.
Es donde se condensa el estudio de las influencias pedagógico – didácticas planificadas que se dan entre profesores y estudiantes, entorno material y socialcultural, al interior de los procesos de enseñanza-aprendizaje y la formación de las teorías correspondientes.
La Universidad require de los mejores profesores, para que así el estudiante obtenga los mejores conocimientos de el profesor, y en su futuro todo quede en la práctica, el alumno universitario dependerá en la sociedad de la educacion que llebará.Los mejores profesores son considerados por como hacen que los estudiantes entiendan, más no por que quien le caiga bien al estudiante, también se lo llama a un buen profesor por quien quiere repartir sus conocimientos y también que el alumno le enseñe al profesor rigiéndose de la siguiente forma :
El docente no debe manipular Ni dominar a los alumnos.
El docente debe planificar situaciones y acciones recíprocas profesor y alumno, con el objetivo de mejorar el aprendizaje.
El maestro no impone, propone, escucha el criterio de los alumnos y participa con ellos en las actividades.
Da oportunidad al alumno que critique y elabore el conocimiento.
Todo maestro, profesor o educador tiene una forma diferente de enseñar es por eso que existen varias clases de educadores como malos,buenos y exelentes.
Pero son los mismos alumnos quienes califican al profesor, sobre todo los los alumnos universitarios ya que en el transcurso de su vida educativa son los que mas profesores han logrado juzgar catalogándolos como buenos o malos profesores.
Aunque quien ayuda a una persona a aprender se le puede considerar en cierto sentido profesor, existen habilidades y destrezas concretas que son necesarias para tener éxito en la profesión de docente.

En la actualidad aumenta el planteamiento de la formación del profesorado a partir de la propia experiencia en el aula y del intercambio de opiniones y experiencias con otros compañeros de profesión mediante cursillos, conferencias o seminarios. Y es que las nuevas tecnologías, los cambios culturales y los avances científicos que se dan en este momento en el mundo, exigen una constante renovación de la escuela y, por tanto, es necesaria la actualización continua de los educadores.

Esta nueva demanda de la figura del docente que requiere la sociedad actual hace que, además de los cambios que se van operando en las universidades y escuelas normales, en las que se forman pedagogos y maestros, los profesores activos tengan que recibir una formación continua, que obtienen por diversos medios. En primer lugar está la actualización constante de su labor como educador, bien centrado en la reflexión personal o grupal sobre su práctica educativa e intercambio de experiencias o bien ampliando permanentemente su currículo con apoyos externos. En segundo lugar está la actuación de la Administración educativa, encargada y responsable última de la formación y preparación de sus ciudadanos.

jueves, 18 de febrero de 2010

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LA HONESTIDAD




Es aquella cualidad humana por la que la persona se determina a elegir actuar siempre con base en la verdad y en la auténtica justicia (dando a cada quien lo que le corresponde, incluida ella misma).

Ser honesto es ser real, acorde con la evidencia que presenta el mundo y sus diversos fenómenos y elementos; es ser genuino, auténtico, objetivo. La honestidad expresa respeto por uno mismo y por los demás, que, como nosotros, "son como son" y no existe razón alguna para esconderlo. Esta actitud siembra confianza en uno mismo y en aquellos quienes están en contacto con la persona honesta.

La honestidad no consiste sólo en franqueza (capacidad de decir la verdad) sino en asumir que la verdad es sólo una y que no depende de personas o consensos sino de lo que el mundo real nos presenta como innegable e imprescindible de reconocer.

Lo que no es la honestidad:

- No es la simple honradez que lleva a la persona a respetar la distribución de los bienes materiales. La honradez es sólo una consecuencia particular de ser honestos y justos.

- No es el mero reconocimiento de las emociones "así me siento" o "es lo que verdaderamente siento". Ser honesto, además implica el análisis de qué tan reales (verdaderos) son nuestros sentimientos y decidirnos a ordenarlos buscando el bien de los demás y el propio.

- No es la desordenada apertura de la propia intimidad en aras de "no esconder quien realmente somos", implicará la verdadera sinceridad, con las personas adecuadas y en los momentos correctos.

- No es la actitud cínica e impúdica por la que se habla de cualquier cosa con cualquiera… la franqueza tiene como prioridad el reconocimiento de la verdad y no el desorden.

Hay que tomar la honestidad en serio, estar conscientes de cómo nos afecta cualquier falta de honestidad por pequeña que sea… Hay que reconocer que es una condición fundamental para las relaciones humanas, para la amistad y la auténtica vida comunitaria. Ser deshonesto es ser falso, injusto, impostado, ficticio. La deshonestidad no respeta a la persona en sí misma y busca la sombra, el encubrimiento: es una disposición a vivir en la oscuridad. La honestidad, en cambio, tiñe la vida de confianza, sinceridad y apertura, y expresa la disposición de vivir a la luz, la luz de la verdad.

LA PUNTUALIDAD

El valor que se construye por el esfuerzo de estar a tiempo en el lugar adecuado.

El valor de la puntualidad es la disciplina de estar a tiempo para cumplir nuestras obligaciones: una cita del trabajo, una reunión de amigos, un compromiso de la oficina, un trabajo pendiente por entregar.

El valor de la puntualidad es necesario para dotar a nuestra personalidad de carácter, orden y eficacia, pues al vivir este valor en plenitud estamos en condiciones de realizar más actividades, desempeñar mejor nuestro trabajo, ser merecedores de confianza.

La falta de puntualidad habla por sí misma, de ahí se deduce con facilidad la escasa o nula organización de nuestro tiempo, de planeación en nuestras actividades, y por supuesto de una agenda, pero, ¿qué hay detrás de todo esto?

Muchas veces la impuntualidad nace del interés que despierta en nosotros una actividad, por ejemplo, es más atractivo para un joven charlar con los amigos que llegar a tiempo a las clases; para otros es preferible hacer una larga sobremesa y retrasar la llegada a la oficina. El resultado de vivir de acuerdo a nuestros gustos, es la pérdida de formalidad en nuestro actuar y poco a poco se reafirma el vicio de llegar tarde.

En este mismo sentido podríamos añadir la importancia que tiene para nosotros un evento, si tenemos una entrevista para solicitar empleo, la reunión para cerrar un negocio o la cita con el director del centro de estudios, hacemos hasta lo imposible para estar a tiempo; pero si es el amigo de siempre, la reunión donde estarán personas que no frecuentamos y conocemos poco, o la persona –según nosotros- representa poca importancia, hacemos lo posible por no estar a tiempo, ¿qué mas da...?

Para ser puntual primeramente debemos ser conscientes que toda persona, evento, reunión, actividad o cita tiene un grado particular de importancia. Nuestra palabra debería ser el sinónimo de garantía para contar con nuestra presencia en el momento preciso y necesario.

Otro factor que obstaculiz

LA HONESTIDAD Ampliar Sobre La Honestidad En Este Sitio

Es aquella cualidad humana por la que la persona se determina a elegir actuar siempre con base en la verdad y en la auténtica justicia (dando a cada quien lo que le corresponde, incluida ella misma).

Ser honesto es ser real, acorde con la evidencia que presenta el mundo y sus diversos fenómenos y elementos; es ser genuino, auténtico, objetivo. La honestidad expresa respeto por uno mismo y por los demás, que, como nosotros, "son como son" y no existe razón alguna para esconderlo. Esta actitud siembra confianza en uno mismo y en aquellos quienes están en contacto con la persona honesta.

La honestidad no consiste sólo en franqueza (capacidad de decir la verdad) sino en asumir que la verdad es sólo una y que no depende de personas o consensos sino de lo que el mundo real nos presenta como innegable e imprescindible de reconocer.

Lo que no es la honestidad:

- No es la simple honradez que lleva a la persona a respetar la distribución de los bienes materiales. La honradez es sólo una consecuencia particular de ser honestos y justos.

- No es el mero reconocimiento de las emociones "así me siento" o "es lo que verdaderamente siento". Ser honesto, además implica el análisis de qué tan reales (verdaderos) son nuestros sentimientos y decidirnos a ordenarlos buscando el bien de los demás y el propio.

- No es la desordenada apertura de la propia intimidad en aras de "no esconder quien realmente somos", implicará la verdadera sinceridad, con las personas adecuadas y en los momentos correctos.

- No es la actitud cínica e impúdica por la que se habla de cualquier cosa con cualquiera… la franqueza tiene como prioridad el reconocimiento de la verdad y no el desorden.

Hay que tomar la honestidad en serio, estar conscientes de cómo nos afecta cualquier falta de honestidad por pequeña que sea… Hay que reconocer que es una condición fundamental para las relaciones humanas, para la amistad y la auténtica vida comunitaria. Ser deshonesto es ser falso, injusto, impostado, ficticio. La deshonestidad no respeta a la persona en sí misma y busca la sombra, el encubrimiento: es una disposición a vivir en la oscuridad. La honestidad, en cambio, tiñe la vida de confianza, sinceridad y apertura, y expresa la disposición de vivir a la luz, la luz de la verdad.

LA PUNTUALIDAD

El valor que se construye por el esfuerzo de estar a tiempo en el lugar adecuado.

El valor de la puntualidad es la disciplina de estar a tiempo para cumplir nuestras obligaciones: una cita del trabajo, una reunión de amigos, un compromiso de la oficina, un trabajo pendiente por entregar.

El valor de la puntualidad es necesario para dotar a nuestra personalidad de carácter, orden y eficacia, pues al vivir este valor en plenitud estamos en condiciones de realizar más actividades, desempeñar mejor nuestro trabajo, ser merecedores de confianza.

La falta de puntualidad habla por sí misma, de ahí se deduce con facilidad la escasa o nula organización de nuestro tiempo, de planeación en nuestras actividades, y por supuesto de una agenda, pero, ¿qué hay detrás de todo esto?

Muchas veces la impuntualidad nace del interés que despierta en nosotros una actividad, por ejemplo, es más atractivo para un joven charlar con los amigos que llegar a tiempo a las clases; para otros es preferible hacer una larga sobremesa y retrasar la llegada a la oficina. El resultado de vivir de acuerdo a nuestros gustos, es la pérdida de formalidad en nuestro actuar y poco a poco se reafirma el vicio de llegar tarde.

En este mismo sentido podríamos añadir la importancia que tiene para nosotros un evento, si tenemos una entrevista para solicitar empleo, la reunión para cerrar un negocio o la cita con el director del centro de estudios, hacemos hasta lo imposible para estar a tiempo; pero si es el amigo de siempre, la reunión donde estarán personas que no frecuentamos y conocemos poco, o la persona –según nosotros- representa poca importancia, hacemos lo posible por no estar a tiempo, ¿qué mas da...?

Para ser puntual primeramente debemos ser conscientes que toda persona, evento, reunión, actividad o cita tiene un grado particular de importancia. Nuestra palabra debería ser el sinónimo de garantía para contar con nuestra presencia en el momento preciso y necesario.

Otro factor que obstaculiza la vivencia de este valor, y es poco visible, se da precisamente en nuestro interior: imaginamos, recordamos, recreamos y supuestamente pensamos cosas diversas a la hora del baño, mientras descansamos un poco en el sofá, cuando pasamos al supermercado a comprar "sólo lo que hace falta", en el pequeño receso que nos damos en la oficina o entre clases... pero en realidad el tiempo pasa tan de prisa, que cuando "despertamos" y por equivocación observamos la hora, es poco lo que se puede hacer para remediar el descuido.

Un aspecto importante de la puntualidad, es concentrarse en la actividad que estamos realizando, procurando mantener nuestra atención para no divagar y aprovechar mejor el tiempo. Para corregir esto, es de gran utilidad programar la alarma de nuestro reloj o computadora (ordenador), pedirle a un familiar o compañero que nos recuerde la hora (algunas veces para no ser molesto y dependiente), etc., porque es necesario poner un remedio inmediato, de otra forma, imposible.

a la vivencia de este valor, y es poco visible, se da precisamente en nuestro interior: imaginamos, recordamos, recreamos y supuestamente pensamos cosas diversas a la hora del baño, mientras descansamos un poco en el sofá, cuando pasamos al supermercado a comprar "sólo lo que hace falta", en el pequeño receso que nos damos en la oficina o entre clases... pero en realidad el tiempo pasa tan de prisa, que cuando "despertamos" y por equivocación observamos la hora, es poco lo que se puede hacer para remediar el descuido.

Un aspecto importante de la puntualidad, es concentrarse en la actividad que estamos realizando, procurando mantener nuestra atención para no divagar y aprovechar mejor el tiempo. Para corregir esto, es de gran utilidad programar la alarma de nuestro reloj o computadora (ordenador), pedirle a un familiar o compañero que nos recuerde la hora (algunas veces para no ser molesto y dependiente), etc., porque es necesario poner un remedio inmediato, de otra forma, imposible.

 
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